La
doble sabiduría
El Acto de Reconocimiento y Homenaje a los Socios de Honor
de
Universitas que
se celebró en Madrid fue la ocasión de recorrer las etapas
de la asociación y los frutos de una amistad con maestros que nos preceden. Crónica
de un mutuo agradecimiento y de una tarea abierta al futuro
Alicia Saliva
En el año 1999 nombramos a reconocidos intelectuales, amigos nuestros,
Socios Honoríficos de la Asociación Universitas, y lo hicimos por
varios motivos. Sumábamos a la realización de una de las definiciones
de ‘honor’ del DRAE - «obsequio, aplauso y agasajo que se tributa
a una persona por sus méritos» - el deseo de caminar acompañados
de grandes maestros que nos precedían en la seriedad y pasión en
el trabajo universitario y que se habían convertido para nosotros, como
afirmamos en nuestra página web, en «un estímulo del que
ya no podíamos prescindir».
Franca y sincera amistad
Este año 2003, teniendo en nuestro haber tantos momentos compartidos con
ellos, quisimos tributarles un acto de homenaje y reconocimiento, pero fuimos
nosotros los agasajados con lo más inesperado e inusual en las relaciones
universitarias, su franca y sincera amistad. Como es costumbre, agradecieron,
pero como no es costumbre, nos dejaron gestos y palabras que iban más
allá de cualquier protocolo, al desplazarse uno de ellos, por ejemplo,
desde Río de Janeiro especialmente para el acto, o exclamar otro después
de una cena juntos: «¡Pero si yo soy Universitas!». Se podrían
enumerar tantos otros momentos en que nos vimos sorprendidos por inconfundibles
expresiones de gratuidad.
El acto de homenaje a los Socios de Honor de Universitas ha dicho con exactitud
qué es esta amistad de profesores y alumnos, de colegas de ámbito
científico y de humanidades, en Universidades públicas y privadas.
Y lo ha dicho desde detalles que podrían pasar inadvertidos hasta la repercusión
pública en la prensa universitaria y madrileña. Se realizó a
finales de febrero en la Escuela de Minas de la Universidad Politécnica
de Madrid, inaugurada en 1841, con cúpulas azules, paredes tapizadas y
columnas de mármol color arena. Este entorno, envidiado por todos como ámbito
académico, nos hablaba a manera de preludio, desde los primeros saludos
en las escaleras, de uno de los temas que más nos atraen y al que siempre
volvemos: la conjunción de la belleza y la verdad.
Fiel a su origen
En el aforo se distinguían profesores, alumnos, padres, amigos. De muchos
de nosotros se oía decir: «Han venido mis padres, mi hermana, mi
jefe, mis colegas. Me vi rodeado de amigos». Comentábamos luego
que es así como empieza a mostrarse la unidad de la persona en cada uno
de nosotros, «allí donde expresas tu identidad están tus
jefes, tus padres, tus colegas».
Presidió el Director General de Universidades de la Comunidad de Madrid,
D. Javier García Cañete, y nos acompañaron otras autoridades
como la Directora General de la Juventud de la Comunidad de Madrid, DĒ María
Dolores Velarde, el Rector de la U. Autónoma de Madrid, D. Ángel
Gabilondo, la Vicerrectora de Extensión Universitaria de la Universidad
de Alcalá, DĒ María Dolores Cabañas, el Director de la Escuela
de Minas, D. Alfonso Maldonado, o el Decano de la Facultad de Derecho de la U.
Complutense, D. José Iturmendi, entre otros.
D. Javier García Cañete quiso agradecer a la Asociación
Universitas el apostar hoy por la Universidad: «El gran reto del profesor
universitario se juega en el día a día, un reto imposible sin un
compromiso personal que se ponga en marcha con los demás profesores y
con la Universidad como motor de desarrollo. Esto no se puede realizar sin una
compañía. El encuentro con un maestro nos anima a que ese compromiso
sea realidad. Agradezco y pido a Universitas que sea fiel a su origen para seguir
con el empeño de construir una Universidad más bella».
Tres etapas
El acto tuvo tres momentos, la presentación de la Asociación Universitas
por uno de sus miembros, D. Javier Ortega, la conferencia dictada por D. José Barea
Tejeiro, Catedrático Emérito de Hacienda Pública de la UAM
y Socio de Honor, y por último la oportunidad de escuchar a cada uno de
los Socios de Honor respondiendo a nuestras preguntas. En la presentación
pudimos volver la mirada a nuestra historia y de ello, ya desde las reuniones
de preparación, estamos agradecidos. Nos hemos dado a conocer a través
de testimonios de grandes pensadores a quienes seguimos y de intervenciones de
quienes participan de este “fruto de amistad” que es Universitas.
Dimos espacio a nuestras intuiciones, deseos, dificultades y aciertos junto a
la palabra de maestros como H. Arendt, G. Steiner o Mons. Scola, que ampliara
nuestro horizonte.
Javier Ortega fue recorriendo la vida de la Asociación desde su nacimiento
en el año 1997 hasta hoy. La presentación tuvo tres apartados que
explicaban a la Asociación en su origen y crecimiento: “El nacimiento
como una amistad libre”, “La maduración de una forma operativa” y “Una
tarea abierta al futuro”. Las primeras cenas mensuales, la posibilidad
de compartir con colegas las dificultades en la educación universitaria,
la necesidad de ampliar el horizonte de lo que investigamos o de comprender a
fondo qué significa nuestra labor docente, la lectura de un texto que
nos ayudara a clarificar nuestra experiencia. Hizo una selección de las
actividades - y creo que todos nos quedamos sorprendidos de su número
- que han nacido siempre de la inquietud de alguno de nosotros y el consecuente
contagio de otros con quienes llevarlas a cabo. Jornadas, seminarios, cursos
de verano, exposiciones, proyectos de colaboración con el Ministerio de
Educación fueron, como afirmaría Javier ya al final, «realizaciones
contingentes del ideal». De allí, principalmente, el gusto y la
libertad de cada propuesta y ejecución.
La lección magistral
D. José Barea desarrolló el tema “Eficiencia y equidad en
la financiación de la Universidad”. Con la autoridad que le concede
su larguísima experiencia académica deshizo varios de los equívocos
más extendidos en torno a la financiación de la Universidad como
servicio público. Ha sido editada en la serie “Cuadernos de Universitas”.
Por último, se procedió al homenaje a los Socios de Honor. Arturo
González Galán recordó a los socios extranjeros que no habían
podido asistir, y pasó a la mención especial de dos Socios de Honor
a título póstumo: Begoña Emperador y Marco Martini. La hermana
de Begoña recibió el homenaje en un clima verdaderamente especial,
que suscitó el aplauso más largo de la noche. Su amistad, que fue
tan verdadera, no ha terminado con su muerte y el momento de su homenaje fue
el ejemplo de que ella permanece entre nosotros.
Maestros y discípulos
La idea de que los Socios contestaran, a modo de presentación, una pregunta
breve, nos permitió conocerlos a través de las razones, sinceras
y claras, con las que describieron su postura ante distintos aspectos: el trabajo,
la amistad, la comunidad universitaria, la verdad, la belleza. Juan Manuel Blanch,
Decano de la Facultad de Derecho de la U. San Pablo-CEU y Catedrático
de Derecho Romano, respondió sobre su experiencia en cuanto a una necesidad
de cambio en la Universidad española, ya que está implicado en
la reforma de la Facultad de Derecho. «Me interesa un cambio, pero que
no sea un cambio para no cambiar. Las palabras ‘Universidad’, ‘Empresa’, ‘Calidad’ no
son las fundamentales sino que deben ser consecuencia de lo principal, que es
la existencia de una Comunidad Universitaria.”
María Dolores de Asís Garrote, Profesora del CEU y Catedrática
Emérita de Literatura Contemporánea de la U. Complutense de Madrid,
hija de profesores universitarios, y salmantina, tiene de la universidad la concepción
de los clásicos, “un consorcio de profesores y alumnos». «Cursé en
primer lugar la carrera de Filología Clásica, donde conocí el
mundo greco-latino y su descubrimiento del interés por la persona. En
mi proyecto universitario he intentado reunir siempre a maestros y discípulos».
Y cita para ilustrar su actitud el De amicitia, de Cicerón: «La
sabiduría, si va unida con la amistad, es doble».
En el panorama universitario
Antonio Fernández Rañada, que ha trabajado en la Junta de Energía
Nuclear y en las Universidades de París, Barcelona, Zaragoza y Complutense
donde ocupa actualmente una Cátedra de Electromagnetismo, responde a la
cuestión de la ciencia como una actividad profundamente humana: «La
ciencia, que nos ayuda a traspasar nuestros límites, comienza con la pregunta.
Los científicos nos tenemos que hacer preguntas: nuestros antepasados
miraban el cielo, apuntaban por dónde salía el sol, por qué los
animales crecen... Esa pregunta nos pincha y junto a ella, nos pincha también
la Belleza de la naturaleza, que nos emociona».
José Andrés Gallego, Catedrático de Historia de la San Pablo-CEU,
Profesor de Investigación del C.S.I.C. y Ex-Rector de la Universidad Católica
de Ávila, nos conoce prácticamente desde la fundación de
Universitas, por ello se le pregunta por el valor de una Asociación como
la nuestra en el panorama universitario español. Habla de la Asociación
como una manera de institucionalizar la amistad. «Esta es una red de relaciones
gratuitas, que no las da el poder. Los amigos se acompañan, y en un tiempo
como el nuestro esto se echa de menos. Es un ámbito de formación
mutua: la amistad se encauza en momentos de relación que tienen un contenido
muy concreto, incluso científico, y esto vence la estrechez de miras que
uno tiende a tener».
Verdad y belleza
Por último, Costantino Tsallis, Investigador Principal en el Centro Brasileiro
de Pesquisas Fisicas. En sus intervenciones hay una constante: la verdad y la
belleza son equivalentes. Se le pidió que nos dijera, entonces, cómo
es la experiencia en su trabajo que le ha llevado a descubrir y afirmar esto.
Respondió a la pregunta sobre la verdad y la belleza contando dos anécdotas: «Y
puesto que veo que entre ustedes hay un fuerte componente religioso... Una de
las cosas que quiero contarles es cuando pregunté a una gran científica
francesa que es una buena amiga mía y tiene una gran fe, cómo podría
ella probar la existencia de Dios. Me contestó que no le interesaba en
absoluto demostrarlo, ya que estaba totalmente segura. Así es para mí la
equivalencia entre la verdad y la belleza: es evidente... como cuando escuchaba
la conferencia que nos ha dado el profesor Barea: yo lo escuchaba y pensaba: “es
bello, luego es verdadero”».